La música y el movimiento siempre fueron parte de mi cotidianidad. Mis recuerdos de infancia están esmaltados de ópera, de cursos de música, de conciertos y salones de músicos, pero también de prácticas de artes marciales en los cuales forjaba mis sentimientos corporales y del movimiento.

Mi camino me lleva naturalmente a profundizar el canto desde distintas formas: cantos líricos con Mark Vento, cantos indios clásicos con Shri Hanuman, cantos improvisados jazz en Conservatorium Van Amsterdam y en Berklee College of Music (Boston), circlesongs con Guillermo Rozenthuler (Londres), Gaël Aubrit y David Eskenaz.

En paralelo me sumerjo en otros enfoques vibratorios: Systema, Nidra Yoga, Chi-kung y especialmente la tradición taoísta del Qigong Tuina (Chi-kung Tui-na) que estudié durante nueve años en Pekín. La escritura de libros también me da momentos de interioridad donde cinceló mi expresión creativa.

Mi encuentro con Audrey y la creación de Kendreka Circles me abrieron una vía de unificación entre distintos aspectos: voz, movimiento, energía, corporalidad y espiritualidad, ritmo, composición instantánea e improvisación musical… Todo está, todo se crea en el instante y se transforma en cada instante. Esta nutrida práctica me abre estados de ser hasta ahora

desconocidos. 

Cada círculo nutre distintamente mi inspiración musical y rítmica. Es una alegría constantemente renovada acompañar a los grupos en estas exploraciones al corazón de la vida.

Pódran encontrarme en todas las próximas fechas.