Atraída desde mi infancia por la expresión artística en todas sus formas, he podido poco a poco intensificar esa búsqueda a través del cuerpo y del movimiento. 

Es el encuentro con la danza giratoria la que abrió, en mí, la posibilidad de permitir emerger un movimiento libre, espontáneo, y dejarme sorprender por un impulso que venía desde adentro. Así pude dar más espacio al placer del movimiento.

Mi afinidad con la interioridad, mi búsqueda personal, de sentido y de intensidad me permitieron entrar directamente en las profundidades de distintas formas de baile que después he podido explorar.

Baile de trance, baile giratorio, baile libre, baile de cinco ritmos o expresividad en el tango son prácticas que me inspiran cada día. Así pude beneficiarme de las enseñanzas de Annika Skattum, Marc Silvestre, Véronique Pioch y Yannick Laval.

Desde entonces no dejo de descubrir y redescubrir mi danza, de saborearla y de invitarla a mi vida de múltiples maneras, dejar que me transforme o, por lo menos, habitarme. 

Las creaciones de Kendreka Circles con Amaël permitieron dar toda su dimensión a las sensaciones tan particulares que ofrece el intercambio simultáneo de la música y la danza. Ese diálogo vivo mantiene nuestra atención y nuestra presencia en el espacio, afila nuestra sensibilidad e intensifica nuestra experiencia.

Compartir la danza es invitar a nuevos caminos, es observar lo insospechado, es sentirse de manera inédita, es ir al descubrimiento de sus mundos, y dar espacio a su imaginación y a sus posibilidades. 

Es desde este lugar, entre sostén e invitación a la libertad, que os llevo a la danza…

Me podrán encontrárme en todas las próximas fechas.